A partir de este 15 de abril, el uso de mascarilla volvió a ser obligatorio en todas las unidades de urgencia de los centros de salud públicos y privados del país. La medida, que se extenderá hasta el 31 de agosto, se enmarca en el decreto de Alerta Sanitaria por virus respiratorios y busca fortalecer la prevención frente al alza de este tipo de enfermedades propias de la temporada otoño-invierno. Aunque su uso ya venía siendo recomendado por las autoridades como una acción preventiva, ahora su carácter obligatorio responde a la necesidad de proteger a pacientes y personal de salud en espacios donde existe mayor riesgo de contagio. Si bien es en espacios particulares, el llamado es a mantener siempre una mascarilla en buenas condiciones. Esta acción se complementa con la campaña de vacunación contra la influenza, que este año fue adelantada con el fin de preparar a la población antes del peak invernal. Sin embargo, pese a la disponibilidad de dosis y a los operativos desplegados en distintos territorios, los niveles de cobertura entre los grupos de riesgo siguen por debajo de lo esperado. Desde la autoridad sanitaria insistieron en la importancia de que personas mayores, niños hasta quinto básico, embarazadas y personas con enfermedades crónicas acudan a vacunarse lo antes posible. La vacuna es gratuita y las dosis están aseguradas para el 100% de las personas que componen estos grupos prioritarios.
A partir de este 15 de abril, el uso de mascarilla volvió a ser obligatorio en todas las unidades de urgencia de los centros de salud públicos y privados del país. La medida, que se extenderá hasta el 31 de agosto, se enmarca en el decreto de Alerta Sanitaria por virus respiratorios y busca fortalecer la prevención frente al alza de este tipo de enfermedades propias de la temporada otoño-invierno. Aunque su uso ya venía siendo recomendado por las autoridades como una acción preventiva, ahora su carácter obligatorio responde a la necesidad de proteger a pacientes y personal de salud en espacios donde existe mayor riesgo de contagio. Si bien es en espacios particulares, el llamado es a mantener siempre una mascarilla en buenas condiciones. Esta acción se complementa con la campaña de vacunación contra la influenza, que este año fue adelantada con el fin de preparar a la población antes del peak invernal. Sin embargo, pese a la disponibilidad de dosis y a los operativos desplegados en distintos territorios, los niveles de cobertura entre los grupos de riesgo siguen por debajo de lo esperado. Desde la autoridad sanitaria insistieron en la importancia de que personas mayores, niños hasta quinto básico, embarazadas y personas con enfermedades crónicas acudan a vacunarse lo antes posible. La vacuna es gratuita y las dosis están aseguradas para el 100% de las personas que componen estos grupos prioritarios.