Considerando el éxito de las versiones anteriores y la necesidad de mantener el diálogo en torno a temas relevantes para la juventud, en Los Andes se realizó por tercer año consecutivo la jornada denominada “La Previa”, instancia de conversación y reflexión dirigida a estudiantes de enseñanza media y donde se genera un espacio seguro para dialogar sobre sexualidad, el consentimiento y la responsabilidad. Los protagonistas de esta iniciativa, destacan la mirada con que se desarrolla el taller, desde la base de ser un apoyo a lo que estos jóvenes traen desde sus hogares. El taller, organizado por el programa Mujeres, Derechos Sexuales y Reproductivos de SernamEG, que ejecuta el municipio andino, tiene como objetivo analizar situaciones cotidianas como la comunicación entre las parejas, el entendimiento y las relaciones sexoafectivas, propiciando espacios de debate y reflexión en torno a conductas que no promueven vínculos saludables. Fomentar el pensamiento crítico entre los estudiantes, incentivándolos a construir relaciones basadas en el respeto mutuo y el consentimiento, es el mayor logro de los organizadores que destacan la importancia de crear espacios educativos para que -en este caso- los jóvenes puedan abordar sus dudas y preocupaciones en un ambiente de confianza.
Considerando el éxito de las versiones anteriores y la necesidad de mantener el diálogo en torno a temas relevantes para la juventud, en Los Andes se realizó por tercer año consecutivo la jornada denominada “La Previa”, instancia de conversación y reflexión dirigida a estudiantes de enseñanza media y donde se genera un espacio seguro para dialogar sobre sexualidad, el consentimiento y la responsabilidad. Los protagonistas de esta iniciativa, destacan la mirada con que se desarrolla el taller, desde la base de ser un apoyo a lo que estos jóvenes traen desde sus hogares. El taller, organizado por el programa Mujeres, Derechos Sexuales y Reproductivos de SernamEG, que ejecuta el municipio andino, tiene como objetivo analizar situaciones cotidianas como la comunicación entre las parejas, el entendimiento y las relaciones sexoafectivas, propiciando espacios de debate y reflexión en torno a conductas que no promueven vínculos saludables. Fomentar el pensamiento crítico entre los estudiantes, incentivándolos a construir relaciones basadas en el respeto mutuo y el consentimiento, es el mayor logro de los organizadores que destacan la importancia de crear espacios educativos para que -en este caso- los jóvenes puedan abordar sus dudas y preocupaciones en un ambiente de confianza.