Decenas de jóvenes andinos presentan excusas para no hacer el servicio militar
Hasta el miércoles hay plazo para que los jóvenes que salieron sorteados para hacer el servicio militar, presenten sus excusas, lo que puede hacerse únicamente en los cantones de reclutamiento que, en caso de Los Andes, que encuentra en el segundo piso de la Delegación Presidencial.
Tras el proceso de inscripción voluntaria y luego el sorteo para completar cupos, el pasado 15 de octubre se dio a conocer el llamado general de quienes deberán cumplir con el Servicio Militar durante el próximo año. Ese mismo día eso sí, comenzó a regir el plazo para aquellos jóvenes que, por diversos motivos, quisieran excusarse y no participar de las filas de la Institución Castrense. Pero ese plazo vence este miércoles 13 de noviembre, por lo que las oficinas del Cantón de Reclutamiento en Los Andes se han visto colmadas de jóvenes presentando sus excusas.
Sin embargo, no todos los motivos son válidos para evitar el servicio. Muchos de los jóvenes presentan documentos relacionados con sus estudios, pero la normativa establece que esto no constituye una excusa válida. En estos casos, se les ofrecen alternativas de cumplimiento, que les permiten compatibilizar sus estudios con las
Las razones, motivos o causales que si pueden eximir a una persona del Servicio Militar, están dispuestas por normativa y detalladas en la página web www.serviciomilitar.cl, donde también pueden revisar si son parte del listado.
Entre los motivos está:
• Declarados no aptos por imposibilidad física, psíquica o social.
• Ser parte de Carabineros, PDI o Gendarmería.
• Personas a las que el cumplimiento del Servicio Militar les provoque un deterioro en la situación socioeconómica de su grupo familiar, como principal fuente de ingreso.
• Personas que contrajeron matrimonio, que estén pronto a ser padres o lo sean anteriormente al sorteo.
• Condenados a pena aflictiva, con excepciones a considerar por la Dirección General de Movilización Nacional.
• Descendientes por consanguinidad en línea recta o en línea colateral, ambos hasta en segundo grado, de víctimas de violaciones a los derechos humanos o de violencia política.