En el caso de Los Andes, desde el DAEM se fue enfático en señalar que existe un trabajo previo, de varios meses donde al menos en el sistema público se contrató a un prevencionista de riesgos y se sumó el acompañamiento del IST para analizar cada detalle que permite propiciar lo que hoy dicen, son lugares seguros.
Junto con esto, se dijo que desde el Mineduc, se ha dado continuidad a las llamadas cuadrillas sanitarias, que debutaron el año pasado en aquellos colegios que optaron por la semi presencialidad y que están compuestas por miembros de las mismas comunidades educativas, incluidos estudiantes, a fin de cuidarse al interior de los establecimientos.
Una sorpresa positiva con la que se encontraron los directivos en el retorno a clases, fue el compromiso de los padres y apoderados que educaron sumamente bien a los niños, niñas y adolescentes en cuanto a las medidas de autocuidado, complementando así los procesos sanitarios.
Todos los establecimientos han recibido el protocolo covid, elaborado por el Ministerio de Educación en conjunto con el Ministerio de Salud, mismos servicios que a través de sus direcciones provinciales y en compañía de funcionarios de la Superintendencia de educación, están visitando los colegios, escuelas y liceos, para acompañar y asegurar su implementación.